Autores: Vivancos Gallego, María Jesús
Hospital Ramón y Cajal. Madrid. España.
Dirección de correspondencia: [email protected]
La sífilis es una enfermedad infecciosa sistémica producida por la espiroqueta Treponema pallidum que constituye un problema de Salud Pública a nivel mundial. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que existen unos 12 millones de nuevos casos de sífilis cada año, siendo un 90% de ellos diagnosticados en países en desarrollo (1). En España, el Sistema de Enfermedades de Declaración Obligatoria (EDOs) mostró en el año 2003 una incidencia de 917 casos de sífilis (2,19 casos por 100.000 habitantes) (2) y en el año 2007 una incidencia de 1.936 casos (4,38 casos por 100.000 habitantes) (3). El colectivo más afectado por la sífilis es el de hombres que tienen sexo con hombres (HSH) (4). En nuestro medio, la prevalencia de infección por el VIH entre los HSH diagnosticados de sífilis es del 29,8% (4).
Fundamentalmente ello se debe a un aumento en la práctica de sexo sin protección con parejas ocasionales (5).
Gran parte de los pacientes, son diagnosticados de sífilis sin que se hayan percatado de la aparición de lesiones.
Además la sífilis se conoce como «la gran simuladora” pues las formas cutáneas pueden ser similares a las de otras enfermedades. Por tanto, además de realizar una historia clínica detallada incluyendo preguntas sobre hábitos sexuales, es necesario realizar análisis de laboratorio para diagnosticarla.
En el paciente VIH positivo, el diagnostico puede ser más complejo; las manifestaciones clínicas de la sífilis son similiares a los pacientes no infectados, aunque algunos estudios hablan de una afectación sistémica más importante y de una mayor tasa de progresión a neurosífilis (6).
Teniendo en cuenta el aumento de casos y la dificultad en el diagnóstico clínico, se expone el caso de un paciente VIH positivo que consulta por lesiones cutáneas.
Se trata de un varón de 42 años, nacido en Colombia, residente en España desde hace 8 años. Diagnosticado de VIH en 2010, sin tratamiento. Refiere lesiones cutáneas que aparecieron hace dos semanas en espalda y posteriormente se generalizaron (Fig.1). Niega haber tomado nuevos fármacos. No refiere viajes al extranjero o estancia en zona rural.
Tiene sexo con hombres (aunque refiere abstinencia en los últimos meses) y niega haber tenido úlceras genitales u orales previas.
A la exploración física, presenta lesiones en tronco forma de pápulas rojizas, algunas con escama blanquecina de aspecto liquenoide/psoriasiforme en tronco (Fig.2), piernas, genitales.
No lesiones en mucosa oral. No lesiones en palmas ni en planta izquierda. En la planta derecha se aprecia una lesión plana en forma de diana (Fig.3). Presenta una adenopatía inguinal izquierda indolora de 2 cm.
Se realiza un raspado de una de las lesiones (Fig.4) para un campo oscuro, sin encontrar treponemas.
Ante la sospecha de sífilis secundaria, se pautan 2.400.000 U de Penicilina Benzatina en monodosis.
Se realizan análisis de laboratorio y se cita para resultados en una semana. El paciente presenta una carga viral de 100.000 copias y CD4 de 300 (17%). IgG+IgM (ELISA): positivo. HEMAGLUTINACIÓN: positivo. RPR 1/256 (título 32).
El paciente es diagnosticado de sífilis secundaria ya tratada y de VIH estadio A2. Es derivado para inicio de tratamiento a su hospital de referencia.
Bibliografía
1. Hook EW, Peeling RW. Syphilis control – a continuing challenge. N Engl J Med 2004;351:122-124.
2. Díaz-Franco A, Noguer-Zambrano, Cano-Portero R. Vigilancia epidemiológica de las enfermedades de transmisión sexual. España 1995-2003. Med Clin (Barc) 2005;125:529-530.
3. Instituto de Salud Carlos III. Centro Nacional de Epidemiología. Vigilancia epidemiológica de las infecciones de transmisión sexual. Enero de 2009. www.isciii.es/htdocs/pdf/its.pdf (acceso el 4 de marzo de 2010)
4. Díaz A, Junquera ML, Esteban V, Martínez B, Pueyo I, Suárez J, et al. HIV/STI co-infection among men who have sex with men in Spain. Euro Surveill 2009;14 pii:19426.
5. Fuente M.J. El resurgir de la sífilis. Actas Dermo-Sifiliográficas 2010;101(10): 817-818
6. Panel de expertos de GESIDA y del Plan Nacional sobre SIDA. Documento de consenso sobre las infecciones de transmisión sexual en personas con VIH (septiembre 2010).
EXCELENTE EL CASO……
SIN ANTECEDENTES…?? VARIOS DIANGNÓSTICOS PERO NINGUNO SEGURO..
GRACIAS !!
Son casos de extrema importancia y gran orgullo para quienes diagnostican clínicamente estos casos. El hecho de tener una adenopatía inguinal de consistencia dura, permite sospechar que tuvo una lesión de entrada del treponema en el pene y que no se observo. La sífilis es la gran imitadora, y si le agregamos la infección por HIV, con toda seguridad que los diagnósticos clínicos se complican mucho más, porque los tiempos se acortan, y se altera la evolución clásica de la lues . En cuanto al tratamiento en estos casos, es mejor utilizar penicilina cristalína y preferiblemente por via endovenosa, para que pase al SNC y así evitar la neurolues. Los felicito.
Dr. José R. Sardi B.
Dermatólogo.
Caracas. Venezuela.