Dr. Antonio David Pérez-Elizondo
Médico Internista-Dermatooncólogo
Instituto Materno-Infantil del Estado de México
Se atiende femenina de 56 años de edad quien acude a consulta por presentar dermatosis localizada a cabeza involucrando el canto externo y el parpado superior derecho caracterizado por dos neoformaciones cupuliformes bien delimitadas sobreelevadas rosadoeritematosas brillantes y traslúcidas de aspecto quístico, asintomáticas de 15 años de evolución, que según refiere le provocan regularmente irritación conjuntival. Acorde a sus antecedentes anatomopatológicos se sabe diabética e hipertensa bajo estricto control médico periódico. Por el aspecto clinico-morfológico típico se hace el diagnóstico de hidrocistomas apocrinos, razón por la cual, en ese preciso momento, previa y detallada explicación, se procede a su extirpación quirúrgica (FIGURA 1).
Previa limpieza regional con solución de clorhexidina e infiltración de preparado anestésico-vasoconstrictor se remueven cerrando con puntos simples de nylon 3-0, sin experimentar sangrado transoperatorio o algún efecto adverso. Se deja celestamine tabletas, mañana y noche durante 5 días, dicloxacilina 12h cápsulas por 7 días, además de ácido fusídico aplicado mañana y noche por 15 días; tiempo en que se retiran los puntos de sutura, sin datos de infección y/o dehiscencia con buen resultado estético con del paso de escasos meses (FIGURA 2).
Se realizan quimioexfoliaciones periódicas con ácido salicílico al 30% en lapsos de 3 semanas para mejorar la coloración y textura de la piel por melasma y otras lesiones benignas.(FIGURA 3).
COMENTARIO
De los tumores cutáneos de diferenciación sudorípara, el cistadenoma apocrino es el más común contabilizando más del 50% de los casos; se observa con cierta frecuencia después de la cuarta o quinta décadas de la vida siendo excepcional en la población infantil. No se reporta alguna variación estacional ni patrón hereditario particular a pesar de qué hay registros de asociación con nevo sebáceo. A diferencia de la variedad ecrina, Mehregan hace más de 40 años afirmó una distinción quística de retención verdadera y el hidrocistoma apocrino como un hamartoma, un tejido tegumentario maduro anormalmente presente en exceso.
Rara vez puede aparecer en mejillas, piel cabelluda, cuello, o pabellones auriculares.
Aunque no hay necesidad de análisis anatomopatológico se llega a encontrar una epidermis no acantósica e incluso aplanada con espacios quísticos limitados por una hilera de células columnares que muestran secreción por decapitación; en disposición periférica a las células secretoras junto con células mioepiteliales más pequeñas en la periferia, de estroma circundante laxo y naturaleza fibrovascular. Habrá que diferenciarlo de un hidrocistoma ecrino, nevo azul, hemangioma, o incluso un melanoma maligno nodular.
Así como se realizó, se aconseja remoción quirúrgica de las mismas ocasionalmente con recidivas casi siempre poco comunes.
Gracias por compartir. Excelente resultado. Una alternativa eficaz es el rasurado simple de estas lesiones seguida por cicatrización por segunda intención.
Tambièn con unos punchs que sean del diàmetro de las lesiones seguida por cicatrización por segunda intención,quedan bien.