jueves 11 de octubre 2007
(www.saludyciencias.com.ar) Una noticia médica, publicada por una de las revistas médicas más prestigiosas del planeta, está rebotando en las primeras planas de los medios masivos. Allí se da cuenta de que -por primera vez en el mundo- un equipo médico logró implantar nuevos vasos sanguíneos, creados en un laboratorio, pero cultivados a partir de tejidos y de células obtenidas del propio paciente implantado.
La experiencia se concretó en un prestigioso centro médico argentino, el Instituto Argentino del Diagnóstico y parte del trabajo médico fue coordinado por el destacado cardiólogo Luis de la Fuente. La revista científica que publicó el trabajo es el "The New England Journal of Medicine".
En concreto, una parte muy compleja de esta experiencia -el cultivo de los vasos sanguíneos que fueron luego injertados en los pacientes voluntarios- lo realizaron los técnicos de la empresa norteamericana Cytograft Tissue Engineering, del estado de California. Es una tarea que lleva su tiempo: alrededor de 6 a 9 meses de trabajo de laboratorio. Luego, los implantes se realizaron en un grupo de 6 pacientes de Argentina, cuya salud y evolución fue seguida de cerca por los profesionales médicos durante más de un año, buscando constatar la seguridad del experimento. Los pacientes en los que se probó el implante tenían entre 29 y 89 años.
Por que es un adelanto importante
Y ¿;cuál es la gran ventaja de esta técnica por ahora experimental? Simple: al tratarse de vasos obtenidos a partir de células del propio paciente, su posterior injerto no corre riesgos de generar rechazos por parte del sistema inmune. Esto reduce fuertemente la necesidad de buscar donaciones de material de donantes compatibles, pero que -igualmente- requieren de drogas inmusupresoras para evitar que el cuerpo ataque a los tejidos que, pese a la compatibilidad, aún reconoce como "extraños".
Además, como valor extra, estos injertos no contienen material sintético, lo que disminuye posibles complicaciones derivadas de reacciones alérgicas o inflamatorias tras el impalnte.
“Esta técnica”, según dijo el cardiólogo de la Fuente “podría ayudar, cuando se extienda y sea una práctica común, a miles de pacientes que sufren enfermedades coronarias, a diabéticos o a personas nacidas con alguna cardiopatía congénita, ya que permite sustituir un vaso sanguíneo dañado por uno nuevo”.
De donde se extrae la muestra inicial
Los vasos sanguíneos “de laboratorio” se generan y se cultivan con paciencia y mucha técnica a partir de muestras extraídas de la piel de los pacientes.
En esta experiencia, se trataba de personas sometidos a diálisis, procedimiento que require de pinchazos semanales para poder conectar el equipo de diálisis cuya función es remplazar al filtrado que normalmente hacen los riñones.
Esos pinchazos vitales se hicieron, en este experimento, sobre las arterias y vasos cultivados en laboratorio e implantados en los pacientes voluntarios. Y con resultados preliminares más que positivos.
Este portento es una gran noticia para los pacientes que adolecen de estas patologías. Junto al implante de celulas madre, es alentador que existan alternativas como esta. Excelente buena nueva. El tiempo tendra la ultima palabra.
Dra. Raquel M Ramos M
Valencia, Venezuela
“VASOS SANGUINEOS A PARTIR DE CÉLULAS CUTÁNEAS”
En el año 2000, fue publicado en el American Journal of Pathology (Am J Pathol 2000;156:361-381), una interesante revisión sobre “mimetismo vasculogénico y angiogénesis vascular” (Vasculogenic mimicry and tumor angiogenesis), por los Drs. Robert Folberg, Mary J.C Hendrix y Andrew J. Maniotas de los Departamentos de Patología y Oftalmología de la Universidad de Illinois (Chicago) y del Centro de Investigación del Cancer y el Departamento de Anatomía y Biología Molecular de la Universidad de Iowa, la cual me pareció de gran interés y totalmente novedoso para ese entonces.
Los autores destacaban en la revisión, los requerimientos que tienen los tumores (se referían principalmente a melanomas (MM) uveales y cutáneos, pero se han reportados estudios en sarcomas y otros tumores malignos), de un aporte sanguíneo para su crecimiento y diseminación hematógena.
El papel de la angiogénesis -el suministro de nuevos vasos dentro de la masa tumoral a partir de vasos preexistentes- como es de suponer, es de vital importancia para la realización de los complejos mecanismos homeostáticos de las células tumorales, no obstante, la angiogénesis puede que no sea el único mecanismo por medio del cual los tumores adquieren su respectiva microcirculación. Las células de melanomas altamente agresivas y metastásicas, son capaces de formar canales vasculares altamente similares in vitro, que son compuestos de una membrana basal que se tiñe positiva con el PAS en ausencia de células endoteliales y fibroblastos. Estos canales formados in vitro son idénticos morfológicamente a los canales PAS positivos en preparaciones histológicas de MM uveales primarios altamente agresivos, en la fase de crecimiento vertical de MM cutáneos y en MM uveal y cutáneo metastático. La generación de canales microvasculares formados por células tumorales agresivas genéticamente dereguladas, fue denominada: “vasculogenic mimicry”, para enfatizar su generación de novo sin participación de células endoteliales e independientes de la angiogénesis.
Aunque no he leido el interesante artículo publicado en el NEJM, al que se refiere el estimado amigo Félix Tapia, a quien agradecería me enviara la referencia completa, resulta obvio que los trabajos pioneros de Folkmann (1971), Hanahan (1996) y Risau (1997), enfatizando la tesis de que la angiogénesis era generada bien por factores de secreción de las células tumorales o por células del estroma circundante, marcaron pauta e inspiración en estas investigaciones actuales que son realmente promisorias.
Un saludo cordial
Dr. Guillermo Planas Girón
Dermatología-Dermatopatología
Caracas-Venezuela