14/01/14:
DERMATÓLOGO MEXICANO
POR ANTONOMASIA…
Amado Por Todos, Como Su Nombre…
Cuando Yo Estudiaba Medicina Sospeché Psoriasis En Mis Uñas De Las Manos…
Un Compañero Me Llevó Al Pabellón 11 Del Hospital General De Mexico Y Me Presentó A Amado…
Recuerdo Que Me Hizo Un Buen Exámen,no Tenía Signos De Psoriasis En Otras Partes Del Cuerpo Y Solo Quedé Con Las Alteraciones De Las Uñas Hasta La Fecha…
En 1960, Curso De Adiestramiento En Dermatoleprología, En El Centro Dermatológico Pascua…
Desde El Primer Momento Nos Hicimos Amigos,me Explicaba Con Toda Calma, Así Es Él, Los Problemas Dermatológicos Y Leprológicos Que Iba A Encontrar En La Campaña Para El Control De Las Enfermedades Crónicas De La Piel…
Estando En La Campaña, Yo Tenía Bajo Mi Responsabilidad Poblaciones Del Sur De Guanajuato Y Otras Del Norte De Michoacán…
Saúl Me Visitaba En La Campaña, Me Asesoraba Y Acompañaba A Algunos Lugares, Siempre Muy Paciente Y Afectuoso…
Cuando Tomé La Materia De Dermatología De La Facultad De Medicina De La Universidad Autónoma De Morelos, En 1979, Invitaba A Amado Para Que Diera Algunas De Las Clases A Mis Alumnos, Siempre Fué, Con Toda Humildad…
Estuvo Presente En La Inauguración De La Sociedad Morelense De Dermatología «dr. Fernando Latapí», Hace 20 Años…
Para La Celebración De Esos 20 Años, Estuvo En Cuernavaca Con Nosotros, En La Casa Azul De Pedro Hoth…
Nos Alegró La Noche Tocando Su Guitarra Y Cantando Muy Juvenilmente…
Heredero De La Dermatología De Latapí, Dermatología Mexicana, Ética Y Clásica, Lo He Seguido, Respetado Y Admirado, Por Conservar Esa Dermatolología Que Yo También Recibi De Ellos Dos…
Querido Amado, Parece Redundancia, Recibirás Un Merecido Homenaje De La Academia Mexicana De Dermatología El Sábado 18 De Enero En La Ciudad De México…
quiero Que Sepas Que Estaré Presente En Alma Porque Mi Cuerpo Está, Por El Momento, Incapacitado Para Asistir…
te Mando Un Abrazo De Discípulo, Colega Y Amigo De Siempre Y Para Siempre…
Conocí al Maestro Amado Saúl en el Hospital Pivado de Piel de Buenos Aires (Prof. Julio M. Borda) y en la Cátedra de Dermatología para Graduados del Hospital Rawson de Buenos Aires (Prof. Luis E. Pierini)en 1960. Ya por ese juvenil entonces, se perfilaba como notable persona y brillante médico… recuerdo su decálogo de leprología… Un abrazo cordial para su merecido homenaje