Hemocromatosis, conocida también como «Diabetes bronce», es una enfermedad hereditaria del metabolismo del hierro presente desde el nacimiento. Este mineral es absorbido en mayores cantidades y se deposita en diversos órganos, causando un daño irreversible del páncreas, articulaciones, hígado y corazón. Suele hacerse sintomática después de los 30 años. La severidad de los síntomas varía de paciente a paciente, ya que la absorción de hierro puede ser influenciada por la ingesta, el consumo de alcohol. Las mujeres debido a las pérdidas menstruales pueden hacerse sintomáticas más tardíamente que los hombres.
El diagnóstico se basa en esta tríada clásica: cirrosis hepática, diabetes mellitus e HIPERPIGMENTACION CUTANEA.
Al leer la biografía de Hemingway, uno puede comprender que existen seres con «la crónica de una muerte anunciada» (G García M). El padre del escritor (quien padecía hemocromatosis) se suicidó cuando este tenía 29 años, lo cual representó un golpe muy duro que nunca pudo superar.
Hemingway creía que la escritura podía liberarlo de la tragedia de su padre. Su vida habla de un hombre encantador, un seductor que se casó muchas veces, practicaba deportes violentos, como la caza y el boxeo. Un hombre de acción, un vitalista que disfrutaba cada día de su existencia, pero había otra realidad, se había alcoholizado y tenía trastornos depresivos. A los 61 años parecía un anciano, su salud se había deteriorado rápidamente durante el último año, sufría de diabetes, hipertensión, cirrosis hepática, problemas de memoria, pérdida de la visión y delirios de persecución. Lo peor era su trastorno bipolar, que a las luces de la terapéutica de la fecha, con electrochoque, poco pudo ayudarle . El 2 de julio de 1961, tomó su escopeta preferida y se suicidó.
«La vida me han prestado y tengo que devolverla » , dice una conocida chacarera del norte argentino. La cuestión es: que hacemos con dicho préstamo.