La uveítis es un término utilizado para definir la inflamación de la úvea, estructura ocular formada por el iris, el cuerpo ciliar, la pars plana, la coroide y la retina; cuando la inflamación está limitada a alguna de estas zonas, se utilizan los términos de iritis, iridociclitis, coroiditis o coriorretinitis , según la parte anatómica afectada. En muchas ocasiones resulta difícil delimitar la inflamación y se utilizan términos más genéricos a) uveítis anterior, afecta al iris y al cuerpo ciliar b) uveítis intermedia, comprende la inflamación de la pars plana , y c) uveítis posterior, es la inflamación de la coroide o retina configurando cuadros de coroiditis, coriorretinitis, retinocorroiditis o vasculitis retiniana.
También se usa el termino panuveitis cuando hay afectación de dos o más segmentos oculares y considerar la situación de unilateralidad o bilateralidad si compromete uno o los dos ojos.
Otro criterio necesario manejar es el de si la uveítis es aguda, cuando la duración es menor de 3 meses, uveítis crónica cuando la duración es mayor de 3 meses con tratamiento adecuado.
La uveítis también puede ser recidivante o no recidivante.
De estas clasificaciones se desprenden los diferentes patrones de presentación de uveítis:
Uveítis anterior
- (Aguda unilateral recidivante)
- (Aguda unilateral no recidivante)
- (Aguda bilateral)
- (Crónica)
Uveítis posterior
- (Retinocorroiditis unilateral/bilateral)
- (Coriorretinitis unilateral/bilateral)
- Vasculitis retiniana
Uveítis intermedia
Panuveítis
- (Con coriorretinitis)
- (Con vasculitis retiniana)
- (Con desprendimiento exudativo)
- (Con vitritis)
El diagnostico etiológico del paciente que acude a una consulta con una uveítis es muy complejo, de forma que hasta el 20% – 30% de los casos se diagnostican como uveítis idiopática o no clasificada.
El papel del oftalmólogo es fundamental, ya que, en primer lugar confirmará el diagnostico de uveítis, en segundo lugar puede diagnosticar las enfermedades que son puramente oftalmológicas y, finalmente, debe orientar el diagnostico etiológico en función de la cronología, localización y morfología de las lesiones.
Es muy importante la detección y el inicio precoz del tratamiento para evitar la progresión de la enfermedad intraocular, que podría dar secuelas graves e incapacitantes.
A los dermatólogos en algunas ocasiones nos corresponde atender algunos pacientes con uveítis y manifestaciones cutáneas principalmente autoinmunes e infecciosas.
Dentro de las autoinmunes están las Espondiloartropatías como la espondilitis anquilosante, síndrome de Reiter, artritis psoriática. Enfermedad inflamatoria intestinal, como la enfermedad de Crohn , colitis ulcerosa. Vasculitis, como la enfermedad de Behcet, enfermedad de Kawasaki, otras vsculitis necrotizantes. Artritis crónica juvenil, sarcoidosis, síndrome de nefritis tubulointerticial , síndrome de Sjögren, lupus eritematoso sistémico, síndrome antifosfolípidos, enfermedad de Vogt-Koyanagi-Harada.
Dentro de las infecciosas: Virica , como el VIH, rubeola, CMV, herpes sarampión, parotiditois, mononucleosis; No víricas como la TBC, toxoplasmosis, toxocara, sífilis, lepra, enfermedad de Lyme, enfermedad de Whipple, candidiosis, criptococosis, aspergiliosis, leptospirosis, borreliosis y muy probablemente COVID-19-
Algunos síndromes de enmarcaramiento: como algunas neoplasias, dentro de ellas enfermedades linfoproliferativas , como un linfoma primario ocular, leucemia, retinoblastoma, metástasis, psoriasis , esclerosis múltiple.
La aparición de una uveítis en un paciente autoinmune ya conocida no implicará problema de diagnostico diferencial. Ahora bien , lo difícil y más complejo es el diagnostico en un paciente una uveítis como primera manifestación clínica.
Los médicos dermatólogos formamos partes de este equipo de especialistas que incluyen al oftalmólogo, reumatólogo, médico internista, inmunólogo, infectólogo, microbiólogo, entre otros apoyados con un buen laboratorio, patólogo e imagenólogo.
El tratamiento se basa fundamentalmente en el glucocorticoide a la dosis de 1 mg/kg/día de prednisona o dosis equivalente; en casos graves se puede usar pulsos 1g/día de metilprednisolona durante 3 días consecutivos., pasando posteriormente a dosis de 1 mg/kg/día por vía oral y con una pauta descendente.
Como fármaco inmunosupersor de elección se utilizará la ciclosporinaa dosis de 5 mg/kg/día, repartido en 2 dosis, en caso de ineficacia se puede aumentar hasta 10 mg/kg/día.
Otras opciones Azatioprina, Metotrexato , Micofenolato de mofetil, Ciclofosfamida, Tacrolimus, Clorambucilo, Interferon ?2a, Tocilizumab, Rituximab, entre otros.
Son paciente de difícil manejo ya que necesitan de un verdadero equipo de trabajo conformado por varios especialistas, constancia en el tratamiento, con pronóstico reservado.
Rolando Hernández Pérez
Excelente Editorial Rolando , como siempre muy explicativa , clara y resaltando el papel de nosotros los Dermatólogos tanto en conocimiento, orientación diagnostica , tratamiento, formando equipo con oftalmólogo y otros esoecialistas . Un abrazo
Excelente revisión Rolando. Una vez más el manejo del paciente es multidisciplinario. Queda claro que los Dermatologos vemos más allá de la piel para el manejo adecuado del paciente
Excelente editorial, muy explícita impecable.
Feliz cumpleaños Dr. Rolando Hernández Pérez, vida y salud.
LM
Interesante recordatorio gracias
Jaime Piquero Martin
Muy bueno RHP!
Feliz cumpleaños ( 03 de Mayo)
Mi comentario, el quinto, reine todo lo dicho.
Gracias.
reune – no reine
estos autocorrectores pueden ser una peste
Muy interesante la información sobre Uveitis el concepto y el enfocarme en la clínica, así como detectar casos que no debo tratar siendo dermatólogo
Muchas gracias a todos los amigos por sus comentarios; William Abramovits, agradecería, por favor, escribir nuevamente tu mensaje, literalmente no lo entendí. RHP
Autocorrect me cambió reune por reine. quizás porque no le puse su acento sobre la u : reúne
Muy buena la información, realmente el paciente debe ser tratado en equipo multidisciplinario, a veces es difícil identificar la causa.
Gracias!
Muy buen recordatorio. Solo agregar que la conjuntiva ocular, así como la piel es excelente absorbiendo medicamentos y muchos de los medicamentos incluidos al final del editorial se pueden utilizar en colirios. Especialmente para el manejo de la uveitis anterior. Siempre me apoyo en oftalmólogo como explica la editorial.
Agregaría la Uveitis de causa idiopática.Son más frecuentes de lo q uno piensa.