Síndrome de Münchhausen o Dermatosis Artefacto por poder

Consultorio médico dermatológico.
Muchas veces.

“Buenos días doctor, mi hijo William de 4 años tiene una “bacteria” o un virus está invadido por este microorganismo, todo su cuerpecito se está llenando de esta “cosa” , mire como se rasca, como se frota los ojos, las orejas y los genitales; le traigo varios videos dormido  y observe los movimientos involuntario de sus ojos, parpados y boca.  Su boca, ojos, ano, pliegues intergluteos, axilas y cuello están rojos e irritados”.

Esta conversación  la tuvimos varias veces, asistió a mi consultorio un número de veces importante, llamadas telefónicas y encuentros accidentales en los centros comerciales  y otros lugares públicos se estaban convirtiendo en desagradables y estresantes.

Examinamos al niño no menos de 8 veces y no encontrábamos nada de importancia, alguna vez, zonas enrojecidas, petequias en áreas expuestas compatibles con picadas de insecto.

Los  exámenes de laboratorios y las interconsultas con médicos pediatras, infectologos no reportaban nada de importancia, solo la preocupación  de los colegas médicos de una exagerada intranquilidad y obsesión de la señora madre por la salud del niño.

En una oportunidad, por insistencia de la madre,  un laboratorio tomó muestra para investigar herpes simple por PCR de lesiones de la piel  y salió positivo para herpes simple tipo II, yo hablé con el bioanalista sobre el caso y me informó que el examen fue realizado en Mérida por una de sus profesoras , lo que quiso decir es que el examen fue bien realizado y era confiable; cuando la paciente regresa a mi consultorio con el examen en su mano exclamó: “ se fija doctor , yo sabía que mi hijo tenía eso, un virus”: Se notaba una cara de satisfacción por el hallazgo .  Si el niño realmente tuviera un PCR positivo para Herpes simple tipo II en plasma tuviera que estar muy mal, grave.

El trastorno facticio o falso, impuesto a otro (síndrome de Münchhausen  por poderes) ocurre cuando alguien miente diciendo que otra persona presenta signos y síntomas físicos o psicológicos de enfermedad, o le provoca lesiones o enfermedades a otra persona con la intención de engañar a los demás.

El trastorno facticio es un trastorno mental grave en el cual una persona engaña a los demás haciéndose el enfermo, enfermándose a propósito o lastimándose a sí mismo. En el caso que presento se trata de una madre ansiosa, de profesión docente, casada con un profesional de la salud, que repetía varias veces que su hijo estaba enfermo y que eso a trastornado su relación de pareja, que no duerme pendiente de su hijo y que lleva 4 años sin relaciones sexuales con su pareja  ni con otra persona,  prácticamente desde que su hijo nació se olvidó de su pareja.

El síndrome Münchhausen consiste en narrar síntomas que no suelen corresponder con una enfermedad concreta y que nunca son objetivados por el médico.

El síndrome de Münchhausen es un trastorno psiquiátrico en el cual la persona se provoca varios y abigarrados síntomas para asumir el rol de paciente de forma inconsciente, provocando ingresos hospitalarios, realizándose pruebas de laboratorios e imagenológicas , sometiéndose a tratamientos médicos y quirúrgicos  complejos y costosos.

La enfermedad fue descrita inicialmente por el Psiquiatra británico Sir Richard Asher en 1951 quien le otorgó el nombre en honor al protagonista de la obra “Las aventuras del Barón de Münchhusen” escritas por Rudolf Eric Raspe en 1784, donde se relataban las increíbles aventuras inventadas de un noble alemán,  asegurando como cierta al mejor estilo quijotesco.

Quienes lo sufren son muy difíciles de evaluar; cuando uno habla con ellos parece que no te “escuchan o no te entienden”, recuerda un soliloquio. Se trata de personas que no buscan obtener un beneficio físico de su simulación, sino una gratificación psicológica por la atención que les presta el personal médico al intentar averiguar la causa de su padecimiento.

Quienes padecen esta enfermedad suelen ser pacientes con escaso apoyo social y familiar que buscan  llamar la atención sin ser consciente de ello, sin embargo no existen datos sobre la causa que la provoca.

Los pacientes acuden a las consultas  de los médicos internistas, dermatólogos, pediatras  y otras especialidades explicándoles dramáticamente sus síntomas, pero suelen responder con vaguedad cuando se les hace preguntas concretas. Nunca se oponen a dejarse someter a exploraciones complementarias, por muy cruentas o costosas que sean, endoscopias, biopsias, exploraciones quirúrgicas, etc. Al comienzo parecen colaborar, pero cuando se le inicia el tratamiento suelen incumplirlo y presentar cualquier tipo de justificación o queja.

Cuando son descubiertos o diagnosticados, suelen reaccionar con hostilidad, negándolo todo y en general suelen desaparecer y no volver nunca más al hospital o a la consulta médica. Son pacientes que suelen peregrinar por diversas consultas, centros médicos, de los que van desapareciendo cuando no reciben el interés y la atención requerida por ellos.

Algunos pueden autoinflinjirse lesiones cutáneas o presentar otro cuadro más complejo como hematuria al introducirse ellos mismo un objeto por la uretra, o bien sangrado por la boca al lesionarse la boca con un objeto cortante.

Existe un subtipo de esta patología psiquiátrica, que puede ser el caso de nuestro paciente : Síndrome de Münchhausen por poder , en este caso quien padece la enfermedad es otra persona cercana al paciente, el progenitor ( la madre) que inflige lesiones a su propio hijo, para luego llevarlo con preocupación a la emergencia o al consultorio médico correspondiente  para tratarlo.

El diagnóstico del síndrome de Münchhausen se basa en la sospecha clínica y deben estar presentes los tres factores siguientes:

  • Fingimiento o producción de síntomas y signos físicos o psicológicos por parte del paciente.
  • Necesidad de asumir el papel de enfermos.
  • Ausencia de incentivos externos (económicos, sociales legales) que puedan provocar esta conducta.

Después de asegurarse el diagnostico, de haberse ganado su confianza, debemos solicitar la intervención del médico psiquiatra o del psicólogo clínico.

La presentación de este caso tiene el interés especial  para que el personal médico dermatológico  conozca esta patología y pensar en ella  cuando estemos enfrente de un paciente con estas característica.

Acerca de Rolando Hernández Pérez

Maestro de la Dermatología Ibero-Latinoamericana. Ex-Jefe Servicio de Dermatología del Hospital General "Dr. Luis Razetti", Barinas - Venezuela. Profesor de Medicina , Universidad de los Andes. Director Médico del GCCNSP - Barinas - Venezuela. Fundador y Co-editor de Pél-L Latinoameriicana (1998). Ex-Presidente de la Sociedad Venezolana de Dermatología

2 comentarios

  1. Hay una película muy buena de suspenso y terror psicológico sobre ello. «Corre» (2021) donde se expone muy bien un terrible caso de Sindrome de Münchauesen por poder. Netflix. Con la actuación magistral de Sarah Paulson. La recomiendo.
    Buen editorial, felicitaciones.

  2. Rolando Hernández Pérez

    Muchas gracias Dra. Amalia Panzarelli Herrera .
    RHP

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