En el libro bíblico de Proverbios se incluyen las llamadas «Palabras de Agur»(Cap 30).En ellas se mencionan las cosas ocultas entre las cuales figura «el rastro de la culebra sobre la peña»(Proverbios 30:18-19). No se trata por supuesto que las culebras no hayan pasado sobre peñas ni que no hayan sido vistas jamás,sino que para el autor, el RASTRO era indetectable. Muy probablemente,hoy en día mediante las actuales técnicas de investigación de escena de crimen u otras similares,pudiera detectarse en la peña el rastro de la sierpe.
La investigación por lo tanto revela aquello que permanecía oculto o aquello cuya exacta significación o valor no era previamente discernible.
Lo mismo sucede con la investigación científica la cual revela cosas previamente existentes pero no conocidas o no entendidas en su real significación. Tomemos algunos ejemplos de la literatura reciente.
Oudhoff y col. en un trabajo en el FASEB Journal de Noviembre encuentran que en la saliva humana hay componentes que estimulan el cierre de las heridas.Se trata de las histatinas 1 y 2.Ya se han encontrado factores en la saliva de roedores que ayudaban a la cicatrización y las mismas histatinas en los humanos también tienen efectos antifúngicos.La acción de estos principios activos ocurre a través de efectos sobre queratinocitos ,estimulando su migración(Oudhoff,M.J.,Bolscher,J.G.M ,Nazmi,K et al. Histatins are the Major Wound-Closure Stimulating Factors in Human Saliva as Identified in Cell Culture Assay. FASEB J,2008,22:3812) La observación frecuente de animales(y niños) lamiéndose las heridas ´tiene pues una sólida justificación. Las histatinas son moléculas relativamente estables ,por lo cual pudieran producirse a gran escala y tener uso terapéutico.
En un artículo muy interesante,que valdría la pena leer en su totalidad, Zamzow at al,estudian varios aspectos de la biología de la interacción de la luz con los seres marinos( Zamzow,J.P.,Nelson,P.A., y Losey,G.S., UV Lights Up Marine Fish.American Scientist 2008, 96: 482-489). El agua absorbe las radiaciones solares de mayor longitud de onda,pero deja pasar las azules,violetas y ultravioletas de allí el color azul del agua profunda.El cristalino de ciertos peces(al contrario del humano)deja pasar la luz ultravioleta y ella es vista por esos peces, como lo demuestran experimentos muy interesantes hechos in vitro con ojos de esos animales a través de los cuales se detecta la luz ultravioleta luego de atravesar esos órganos.Esto no sucede en todas las especies.En estudios hechos en peces de los corales hawaiianos,se encuentra que ciertos predadores no ven la luz ultravioleta y que ciertos peces que sirven de presa evaden sus destinos cambiando sus colores de tal forma que sean borrosos(y poco notados)a la luz de mayor longitud pero discernibles con la luz ultravioleta.
Así esos peces aparecen como borrosos para sus predadores pero muy notables para sus congéneres.Finalmente,el moco de ciertos peces funciona como pantalla antiultravioleta.Esa propiedad se debe a compuestos aminoacídicos(aminoácidos parecidos a la mycosporina) su producción es función de la intensidad de luz y de la turbidez o limpidez del agua.
Los autores no lo mencionan;pero para un dermatólogo la existencia de protectores solares externos que se mantienen aún en un medio acuoso no deja de tener un gran interés práctico y conceptual.Hay carcinomas y melanomas de los tegumentos en esos u otros peces???
Hay pues mucho que detectar en el paso de la luz por el agua como también en el rastro de la culebra sobre la peña.
Mauricio Goihman Yahr.